Como ya vimos en otro artículo lectores de libros electrónicos hay muchos, unos con más prestaciones que otros, pero de entre todos ellos yo me quedo con el Papyre 6.1, que como ya sabéis es el mismo que el Jinke v3, hanlin v3, lbook, etc.
El Papyre 6.1 es la versión distribuida en España por la empresa Facthor en su tienda online papyre.com, actualmente al precio de 299 euros todo incluido. Este lector ha sido por el que me he decidido por diferentes motivos, el primero su relación precio/calidad/prestaciones, también ha influido el estupendo trato que me han dispensado desde Facthor, el hecho de que Jinke es la empresa que más actualizaciones saca para sus ereaders y el que sea el lector de ebooks que más formatos admite, al menos que yo sepa, hasta el momento.
El Papyre 6.1 tiene un peso y tamaño adecuados para hacer cómoda la lectura y el transporte, por supuesto es tecnología de tinta electrónica, con lo que puedes leer en el como si de un libro de papel se tratase, es decir, sin ningún cansancio para la vista. Como sistema operativo cuenta con un núcleo de linux, admitiendo como ya he dicho antes bastantes formatos, incluso con la última actualización que Facthor a puesto a disposición de los usuarios, admite mobipocket, pdf encriptado y archivos lit, aunque es con el formato fb2 con el que me quedo de entre todos ellos.
Este formato es un tanto desconocido, sin embargo para mi gusto presenta muchas ventajas sobre otros como el pdf por ejemplo, la primera que el Papyre 6.1 parece estar hecho para este formato, los documentos que presenta están bien formateados y ajustados en pantalla, a excepción de que los guiones para cortar palabras entre líneas que los hace un poco a su manera, permite ajustar tanto el tipo de fuente como su tamaño e interlineado, reorganizando el libro automáticamente en función de estas selecciones, algo que me gustaría matizar pues no se trata de hacer zoom como ocurre con los documentos o libros en formato pdf, sino de ajustar completamente el documento o libro sin quedar partes perdidas fuera de los margenes de la pantalla y que no podemos ver.
En fin, que son tantas las ventajas que presenta para mi gusto este dispositivo que tendré que ir comentándolas en varios artículos.
El Papyre 6.1 es la versión distribuida en España por la empresa Facthor en su tienda online papyre.com, actualmente al precio de 299 euros todo incluido. Este lector ha sido por el que me he decidido por diferentes motivos, el primero su relación precio/calidad/prestaciones, también ha influido el estupendo trato que me han dispensado desde Facthor, el hecho de que Jinke es la empresa que más actualizaciones saca para sus ereaders y el que sea el lector de ebooks que más formatos admite, al menos que yo sepa, hasta el momento.
El Papyre 6.1 tiene un peso y tamaño adecuados para hacer cómoda la lectura y el transporte, por supuesto es tecnología de tinta electrónica, con lo que puedes leer en el como si de un libro de papel se tratase, es decir, sin ningún cansancio para la vista. Como sistema operativo cuenta con un núcleo de linux, admitiendo como ya he dicho antes bastantes formatos, incluso con la última actualización que Facthor a puesto a disposición de los usuarios, admite mobipocket, pdf encriptado y archivos lit, aunque es con el formato fb2 con el que me quedo de entre todos ellos.
Este formato es un tanto desconocido, sin embargo para mi gusto presenta muchas ventajas sobre otros como el pdf por ejemplo, la primera que el Papyre 6.1 parece estar hecho para este formato, los documentos que presenta están bien formateados y ajustados en pantalla, a excepción de que los guiones para cortar palabras entre líneas que los hace un poco a su manera, permite ajustar tanto el tipo de fuente como su tamaño e interlineado, reorganizando el libro automáticamente en función de estas selecciones, algo que me gustaría matizar pues no se trata de hacer zoom como ocurre con los documentos o libros en formato pdf, sino de ajustar completamente el documento o libro sin quedar partes perdidas fuera de los margenes de la pantalla y que no podemos ver.
En fin, que son tantas las ventajas que presenta para mi gusto este dispositivo que tendré que ir comentándolas en varios artículos.